SÍ…

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Los fieles creyentes tenemos una relación con Dios enfocada en Jesucristo, de tal modo que vemos al Padre a través del Hijo, en la comunión del Espíritu Santo.  Esto por el manto de su sangre de redención que Jesús ha colocado entre el Padre, a favor nuestro ¡Gloria sea a Él!  Así que vemos al Padre sólo a través de Cristo nuestro Señor.  Mirando a Jesús en la cruz y oírlo en la cuarta expresión o queja en que pronunciara: “Padre mío, ¿por qué me has desamparado?”  Por un instante, con gran reverencia “miramos y oímos” al Padre, su empatía y hablar… De seguro habríamos escuchado…

Si no quito mis ojos, por un momento

¿A dónde iría a parar mi santidad?

Si así no fuera, ¿cómo entender el tormento,

De la condición del hombre y su pecar?

Si no cierro mis ojos en este instante

Y no vuelvo mi rostro del todo hacia un lado,

¿Cómo podría a Ti mismo mostrarte

Todo tu alcance como Mi Sacrificado?

Si no muestro lo grande de ese alcance

Ante los hombres y demonios que esto observan

Jamás se arrojaría del todo el balance.

¡Cómo taladraría el pecado sin fronteras!

No fue sólo la mirada que te quité

Pues mis oídos también los cerré

Es como retirar toda Mi Misericordia,

Como arrancar toda Mi Paz y Mi Concordia.

Pasará este proceso, este momento

Los siglos que han esperado, alabarán

Y los milenios y milenios que luego vendrán,

Aplaudirán la gloria de este, SILENCIO…

 

 

DERECHOS

pergamino7_01En el albor de la historia, cuando Dios estaba genuinamente en el lugar correspondiente que le pertenece con respecto a la Tierra, todo era paz. Los que vivían en el Edén (sólo se registran los nombres de los protagonistas) Adán y Eva, entendían el orden de acción y sujeción, como el lugar idóneo o complementario. Cada uno lo cumplía a perfección. Pero, cuando ella asumió el papel independiente de tomar decisiones unilaterales o sea, partiendo de sí misma, sin contemplar el orden direccional de su marido, según el orden de Dios, todo se vino abajo. Se iniciaba una guerra por “quién manda”. Desde entonces el mundo vive en guerra, naturalmente inducido por Satanás, quien inició la guerra en el cielo y fue lanzado a la tierra en donde originalmente ofrecía buenos oficios. Entonces ofrece ese desgraciado “servicio” en ella.
Viven así desde que pretendieron aquel desdichado día desplazar a Dios para cada uno ponerse en esa primerísima posición. A su vez, quien quedó abajo, retó, agredió, asesinó y se puso en ese lugar, para repetirse el asunto vez tras vez. En esa lucha la sociedad se ha pasado en guerra desde entonces, por cerca de seis mil años y aun continúa. Luego de la Primera Guerra Mundial, se organizaron los principales países del mundo y dialogaron, establecieron La Liga de las Naciones, todo con el propósito de paz permanente. Con todo y eso vino La Segunda guerra Mundial. Entonces surgió La Organización de las Naciones Unidas (ONU). La primera duró tres décadas. La segunda ha durado al menos un poco más de seis décadas (el doble). Naturalmente hoy las armas disponibles son sumamente potentes y exterminadoras, creo que lo piensan tres veces o más. (¡Qué bueno!) Con todo y eso no ha faltado la guerra de Korea, Viet Nam, Afganistán, Irak y tantas más.
Junto con la iniciativa de Naciones Unidas, el 10 de diciembre de 1948 en París se redactó La declaración de Derechos Civiles. Esto constituye una exposición detallada de las garantías que los países miembros reconocen a los individuos. Esta está inspirada en lo que motivó La revolución Francesa de 1789, pero más completa. No sólo condena la esclavitud, si no también el racismo y la tortura. Proclama además el derecho de toda persona humana a la educación y a la cultura, los derechos de opinión, expresión, asociación y el voto. También la inviolabilidad de domicilio y la libertad de circulación. Cubre además el trabajo, la asistencia y la seguridad social, el descanso y otros más… Pero en nuestras ciudades todos los días asaltan y asesinan. Escalan los hogares, violan las mujeres, etc… con todo y eso. Todo porque dieron la espalda a Dios. Si la sociedad sabe, que eso fue lo mismo que hicieron nuestros padres hace 60 siglos, ¿por qué no volvernos a Dios? El nos recibe. De hecho, los que viven dentro de la Iglesia de Cristo, viven dentro del Reino de los Cielos, son felices, viven esperando su venida, cuando todo cambiará realmente. ¡Te esperamos, Señor!

Amén

Las guerras no han faltado en la tierra, desde que las iniciara Caín a las afueras del Edén.  En otras palabras desde la segunda generación de los vivientes en ésta.  Desde entonces la lucha por detenerlas.  Estas dispersan muertes, con que inician el listado de males, que traen como resultado.  No olvidamos, por poner un ejemplo, que se estableció La Liga De las Naciones.  Esto fue después de La Primera Guerra Mundial, para que no se repitiera.  A pesar de ella vino La Segunda Guerra Mundial.  Aparte de la milenaria cantidad de ellas a lo largo de la historia.

Lo cierto es que se celebran grandes de cimas mundiales para zanjar diferencias, pero las guerras continúan.  Naciones Unidas es el fruto de eso después de la Segunda Guerra Mundial.  Los delegados se sientan allí y expresan sus largos y hermosos discursos.  Allí invocan tres cosas principales y elementales para vivir en orden: justicia, verdad y paz.  Un obrar que pase la prueba de la balanza.  Un comunicar libre de mentiras.  Una expresión de vida a prueba de violencia.

Lleva la humanidad sesenta siglos diciendo: “seamos puros, diáfanos, sosegados.  Entonces la justicia, la paz y la verdad clama, o sea, Jesucristo expresa: “sin mi nada podéis hacer”…y la triste y acostumbrada voz del mundo retumba: “Dios, fuera de nuestros asuntos”.  Entonces viene la gloria divina solamente sobre aquellos que le responden amen al Señor.  Estos se llaman, IGLESIA.

Ejército

Cuando hablamos de ejército, hablamos de personas, hombres y mujeres acuartelados y entrenados.  Nos referimos a todo ese caudal de equipo bélico  que disparan y explotan armas, arrojando municiones y otras piezas de mayor tamaño; éstas destruyen y desarticulan al enemigo.  En otras palabras, un equipo para matar y destruir.

Así que podemos pensar y ver el cuadro de Napoleón y Hitler entre otros.  En todos ellos la cosa más importante es la toma del poder.

Jesús de Nazaret, el rey líder por excelencia de las edades, enfrentó un mundo agitado; había que enfrentarlo.  Veamos sus palabras: “no he venido para traer paz si no espada”.  Los que creyeron en El le siguieron.  Vieron espadas y sangre correr, pero, en sus cuerpos, no infringieron heridas a nadie, tampoco Jesús, su líder.

Entonces, ¿qué guerra?  Esto se peleó con Su palabra, eso es su espada.  El Nazareno formó un ejército llamado Iglesia para estar en pie de paz.  Esto lo profetizó más de quinientos años antes el profeta   Isaías: ”¡Cuán hermosos son los pies sobre los montes del que trae alegres nuevas, del que anuncia la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salvación, del que dice: “¡tu Dios reina!” Ese es el mensaje que recibe la Iglesia, que vive y está parada en pies de paz.

¿Explosión o Unión?

Estas palabras son totalmente desasociadas.  Donde hay unión, hay paz.  Cuando está allí aquel ingrediente que produce explosión y alguien lo activa, vendrá la fragmentación con ella.  Entonces ese regadío que hará de aquel cuerpo otrora solido ahora uno en escombro separado.

Entonces habría que preguntar, ¿a que vino Jesús?  ¿Vino a unir o a romper?  Naturalmente que vino a algo.  Para dejar las cosas como estaban, mejor se habría quedado en el cielo adorado por sus ángeles y que la tierra y los hombres siguieran en su declinación cada cual como mejor o peor quisiera.

Pero no, la tierra es suya.  Nos ama y quiere lo mejor para nosotros.  Entonces había que empezar por romper expresiones, acciones, mentalidad, hábitos, vida.

Veamos sus palabra en Mateo 10:34: “No penséis que he venido para traer paz a esta tierra; no he venido para traer paz sino espada.”  ¿Sabes que significa?  Que rompería desde el primer centro o modelo de institución y así todo grupo social de la tierra.  Así que rotura de relaciones entre padres e hijos, maestro y discípulo, jefe y empleados, socios comerciales, etc.  ¿Por qué?  Porque las uniones de la tierra están basados en cimientos equivocados y egoístas.

Pero Jesús traía una unidad fundamental en el amor, lo más perfecto del universo.  La Biblia dice: “Dios es amor”.  Todo lo que compone a Dios en toda su grandeza es amor.

Admirable

Tuve la oportunidad de visitar a una de mis nietecitas en el estado de la Florida.  Tiene veintidós años, se graduó de artes culinarias y está trabajando en un famoso hotel de la ciudad de Orlando.  Aún es soltera y se mantiene  orando a Dios que le envíe un verdadero siervo suyo para esposo.

El caso es, que entré a su habitación y saltaban a la vista sus pensamientos, plasmados en manuscritos en los espejos donde ella se peina y en las paredes que rodean la habitación, al igual que en su baño.

Se destaca uno que comenzaba: “oye Israel” con su cita bíblica en Deuteronomio 6:4-5.  Este es un mensaje de Dios para su pueblo que El le reclama que sea oído y le dice: ”amarás a tu Dios”.

Ciertamente Tery Ann, que es su nombre, tiene un deseo ardiente de ser una buena hija de Dios y prácticamente lo grita como testimonio.  Ella da consejería, ora por las peticiones para recuperación de aquellas personas que han caído en enfermedad o que se van a someter a cirugía.

Recientemente estuvo en Atlanta en una súper convención de jóvenes llamada “Passion”;  se reunieron ochenta y cinco mil personas.  Allí recibieron conferencias, se ofrecieron cánticos por grupos musicales famosos, todos para el rey Jesús, en aras de fortalecer vidas de jóvenes, para una vida de fidelidad a Dios y de servicio a la humanidad.

¡Qué hermoso modelo de fidelidad! Jóvenes que no están entregados a la vida vacía y sin sentido en quienes descansa el futuro de nuestras comunidades.  Muchachas y muchachos que no están bregando con armas y drogas destructivas, si no con la palabra de amor, paz y seguridad.

¡Alerta!

Hay una experiencia en la vida del profeta Elías de la que podemos extraer una enseñanza.  Es interesante que parece ser un estándar para cada persona.  Conocemos por su historia narrada en primera de Reyes: 18:17-40, que enfrentó a cuatrocientos cincuenta profetas de Baal, cuatrocientos de Acera y a “todo el pueblo de Israel” en el monte Carmelo.

Entendemos la gran valentía del profeta para este desafío, sabiendo que la gran masa israelí allí presente claudicaba sobre su fe.  Así que es como si él estuviera solo frente a todos.  Sentía la presión de todos sobre él.

Conocemos la aplastante derrota que Dios le dio a todos ellos.  Ocurrió que cuando la verdad fue manifestada, el pueblo presente se convirtió en aliado a su favor, que antes no lo era.  Acabaron con ochocientos cincuenta enemigos, malos maestros que enseñaban perversiones al pueblo.   Fue un día de gran victoria en Israel.

…Pero, ¿qué pasó al otro día?…que la reina Jezabel se enteró que aquellos secuaces que comían de su mesa, estaban muertos por la mano de Elías…  cuando esto ocurrió, ella pronunció sentencia de muerte contra el profeta.  Una vez que él conoce esto se llena de temor.

Debemos hacer la observación que esto parece una regla a los humanos, temor tras la victoria.   Entonces hay que prepararse.  La victoria de hoy debe ser sobre estímulo para enfrentar el mañana.  No permitas que el engaño venga a quitarte tu gozo y paz que es el premio de tu victoria.  Dios te lo ha dado.

¡Tranquilos!

En Nepal,  ese país asiático al noroeste de la India, en la cordillera del Himalaya, se hayan los picos más altos del mundo, como el Everest, el más alto de todos.

También en este país hay un mito que ya lleva cuatrocientos años de existencia, el abominable hombre de las nieves. Tiene supuestamente el aspecto de un gorila de seis a nueve pies, gris, y que ataca a los humanos en regiones solitarias, altas, nevadas. Los nativos de allí le llaman Yeti.

Excursiones científicas acuden allí a investigar desde hace mucho tiempo. Estos indagan, hacen estudios, retratan supuestas huellas y así poco a poco van haciendo una bomba o bulto de información que no conduce a nada que no sea seguir ampliando la leyenda.

Pero, esa es otra más en el correr de fantasías que hay circulando en el mundo. Puerto Rico, siendo tan pequeño entre esos países tiene también sus leyendas. Esta isla tiene a su “chupa cabra”.

Le han llamado así, pues sus supuestas víctimas que son animales como gallinas, conejos, cabras etc. se encuentran muertas, sin sangre y con un roto en la parte de atrás. ¿ Qué es eso?… apúntelo, son el producto de naves estadounidenses experimentales y silenciosas que desde una relativa altura realizan cirugías a control remoto. Todo se aclarará cuando se de esto a la publicidad. Mientras tanto, Dios sigue en su lugar en control de todo como siempre ha estado. ¡Paz, hijos míos!

Consejo

Muchas personas desconocen del duro trabajo de un pastor. Entre sus responsabilidades mayores está la dura tarea de la predicación. Se trata de aquello que llevará la oveja a su interior, que le sostendrá, que se hará suyo y que será   fuente de energía para atender sus necesidades, aún aquellas que son sumamente apremiantes. De eso se trata.

Entonces, ¿a dónde acudir en busca de eso que es para ella tan importante? ¿A nuestra experiencia? Sin duda es importante como un renglón que añadir. ¿A nuestra preparación del conocimiento humano? También es importante conocer esos comportamientos colectivos.

Entonces meditamos profundamente… o de seguro en Dios quien le creó y sabe cómo funciona, como decimos a veces, refiérase al fabricante. Entonces es asunto de ir al Rey, a la autoridad de quien somos heraldos.

Entonces frente a Él, mientras vemos su hermosura, mientras nos llenamos de su sabiduría eterna, esa que dura pues es para hoy y para la eternidad, estamos listos para regresar a la oveja, por tanto está en nuestras manos eso que la oveja huele y conoce. Entonces lo come, lo disfruta, no importa contenga alguna porción amarga, sabe que viene del Rey y que le llevará a la paz y a la seguridad.